Juro que el embale de la semana pasada por la escritura me había entusiasmado como para continuar con esta gimnasia en pos de evitar mi atrofie cerebral.
A propósito de esto, recomiendo a nuestro filósofo y neurólogo exiliado, Miguel Bensayag y sus últimos análisis sobre cómo el celu va carcomiéndonos el bocho.
Pero sigo con el contexto. Cucharada de aceite de ricino, de esas difíciles de digerir, resultó la estigmatización de Cristina a Axel dejándosela servida al leoncito y arruinando a propios.
Por fortuna, encuentro amig/entrañable con profesores y ex compañeros de la UNLZ en casa de Ale Grinberg sirvió para espadearle en conjunto a la desazón política que sistemáticamente el gobierno promueve cual vacuna bcg. ¿Muy baby boomer lo mío hoy? (por no decir viejochotismo)
Qué bueno abrazarse en las ideas y debatir sobre el presente, escuchar pormenorizadamente y entre risas el relato sobre un chino ricachón de Once, discutir a Francisco o saber más acerca del 'neumático tour' a Paraguay. Pero también aprender a rumiar sin acostumbrarse a los obstáculos que la vida le presenta a alumnitos de escuelas modestas.
Igual queda claro que la cofradía académica da pelea.
Y no sólo eso, dos de las eminencias de este "asalto" de vino, gaseosas y manjares (pionono, lengua a la vinagreta, knishes, tortilla y tomates confitados) de jornada anual y extraordinaria, lanzaron sendas piedras con sus respectivas conclusiones.
"La gran diferencia de Argentina respecto de América, son sus sindicatos. Buenos, corruptos o limitados, siempre necesarios". A esto agregar la honestidad brutal dentro del rubro escolar: "Durante mucho tiempo las maestras miraban o planteaban con desconfianza el concepto de 'trabajadores de la educación'". Vestían como nadie, laaaas joyas que lucían, enumeran con espíritu crítico.
Horas más tarde llegó el día de la madre. Saludo tempranero a suegra que la rema. Lógicamente antes a la compañera responsable de la crianza de acá.
Ya al mediodía, segundo encuentro excepcional para este fin de semana, en Santa Evita, organizado por hermano. Madre, con su lógica desideologizada ideología, fastidiada al principio. "Cuando yo era chico Perón y la UES blablá"
-Sí, ya sabemos. Feliz día. Intentamos frenar sólo para aquietar un factible torbellino que intenta desatar en la puerta del lugar ella, nuestra mamá, la gorila de la mesa.
Por fortuna todo continuó en su medida y armoniosamente. Ahí, sobrina pintando mantelito con Pocho y Evita, ambos jóvenes y la virtud de transformarnos en buenos alcanzó como para que pipones viéramos apaciguar nuestras almas.
Por supuesto que se puede abandonar en este espacio el etnocentrismo doméstico y decir que hay fotos que también se colaron entre la cotidianeidad.
Ahí va mujer de mediana edad, algo torpe pero dispuesta a tomarse el tren, con pucho encendido. Hay algo en ese gesto de emancipación que siempre resulta atractivo a la vista. Como cargarse la vida encima y hacer una pausa todo junto y al mismo tiempo.
Más planteos para las redes o vía streaming resultan la peculiaridad de este calendario semanal: cumple del hermano de Karina y empleado de Mauricio, pero también de Charly García (fecha coincidente con Federico Moura) y Estela de Carlotto.
En cuanto al primero, pregunto ahora por acá (dado que no lo sigo en X) ¿alguien sabe si Javito saludó a su mamá y a las de todo el país el último domingo en su día?
Tengo la sospecha de que la incontrolable voracidad por escupir miserias (ya fueron dichas, viralizadas y replicadas) en los últimos días, están ancladas con cierto puzle extraviado en su Edipo dudoso o nulamente correspondido.
Vade apud Yuyito (algo así como lo contrario de Vademécum) O sea, haga algo novia part time del presi...
Siguió la semana con alguna esporádica lectura (insisto con libro de Masotta sobre Arlt para pensar actual gestión, pero también la concepción de la clase media); más data sobre el onedirectioner fallecido: Liam, víctima de un cóctel mortal, pero también rajado por Sello discográfico vía mail, limitado su ingreso a USA (precisamente por sus problemas de consumo) y abandonado por su chica ("me ahogaba", dijo la influencer escapándose de Buenos Aires unos días antes)
Paros y reclamos con clases públicas abiertas bastan para aplaudir la perseverancia estudiantil a prueba de trolls y embarradores de agenda necesaria (sí, insisto con que nuestra escorpiona pifió hablando de traición y coso)
...Y llego a noche insomne del miércoles. Ya 24 horas antes Gaby (Nuestro Milito) había vacunado al muñeco, en tanto en la copa Argentina, Román se volvería noticia al bancar la parada de sus hinchas en contra de la represión de la cana. Luego los jugadores del lobo iban a "esmerarse" en los penales para dejar a Boca con vida.
Casi de medianoche, la tímida lluvia conurbana yace imperceptible. Boludeo con youtube. Hay programa entretenido de psicóloga radical, parece (no de la UCR) y joven conductora atenta: El padre, las obsesiones, el lenguaje, el autismo, así clips de 20 minutos con reflexiones básicas. Aunque para este caso me detuve en el primer tema.
Al rato, esquivé a Masotta y Lacan (pesado uno, con tocs recurrentes) para ir por María Moreno en dos programas de los 7 locos. Atrae la escriba con su aspecto, en esa suerte de Lilita joven y beatnik argenta, como incluso gustó definirse a sí misma en la nota con Mucci.
María habla de Walsh y la carta a su hija Victoria, tras su muerte. Cuestiona a Rodolfo sin decir que lo cuestiona. Uno empieza a saber decantar esas formas de decir desde el silencio. Modo Kici, diríamos justamente.
Surge el término Elegía y resulta inevitable caer en el aspecto jodido que conlleva referirse a los 70. También, cual moneda siempre asoma algo épico en esa revisión. Hay algo "Universal" como recuerda Moreno, sobre una experiencia que rescata de 'Oración', el libro de recorridos que presenta. En tal caso rememora la oportunidad que tuvo de chica al asistir a la asunción de Salvador Allende.
Hay un duelo intenso entre conductora e invitada. Con respeto. De esos que no abundan donde queda claro que la competencia intelectual siempre está en juego y en el debate se titubea como espectador, al mismo tiempo que la incertidumbre por algo siempre en tensión como implica "tener la razón", nos enriquece. Oxigena.
Una pausa:
Cuelo oportuno la voz de Arlt y Masotta respecto del cuerpo del otro y en relación con lo que venía hablando. (Si gustan continuar leyendo...claro)
Sigo con segundo programa de Moreno y Mucci, de tres o cuatro años atrás por lo menos. De repente recuerdo que la periodista y ensayista de Página tuvo un problema grave de salud. Que siguió peleándola y escribiendo a pesar de todo. Ya leí su Black Out y sé de su tozudez y talento. Envidiable, claro.
Veo un video sobre un homenaje que hace un par de semanas se le hizo en la Legislatura Porteña. Tengo una sospecha presta a incomodarme. "Viste lo que le pasó a Caparros", me había preguntado esta tarde mi amigo Capi y su voz impuso pausa al video oficial, listo para mirar. "Tiene lo mismo que el Negro Fontanarrosa".
Abandoné cual acto reflejo a la Moreno frágil. Hice lo mismo que Mucci, eludiendo el debate sobre el proceder del autor de Operación Masacre con las palabras "no dichas" de Vicky, según María, antes de quitarse la vida, acorralada por los milicos.
La frase en cuestión habría procedido de su pareja y jefe de la brigada. "Yo elijo morirme, no ustedes", se erige. argumentación que Walsh reivindicó y que la conductora de 7 locos, desistió de indagar, a contramano de la propuesta que expuso su invitada, Moreno.
Mucci se abstine. Como yo y la legislatura porteña. Como mi limitación por no repreguntarle a mi amigo, respecto del autor de La Voluntad.
A tientas quiero buscar un refugio (otra persona en realidad que cumpla tal función). Algún sueño que ayude a teletransportarse, esa función futurista, aprendida de alguna serie de adolescente.
Pienso en José Pablo Feinmann y una potencial cátedra suya desmenuzando a Lacan y ay, grave error.
Pero youtube lo trae primero notoriamente delgado, después otro video con él más roto, en los albores de su enfermedad. Además, curiosamente, tardan en aparecer sus clases.
Los algoritmos no suelen conformarnos si somos ocasionales clientes.
O acaso vayan más rápido, cual morbo (cita triste en consonancia con la semana) para traerme/nos un suponer más dañino. La enfermedad como camino, creo se titulaba un libro. El dolor como principal sentido.
Tiempos raros con esto de ver flaquecer a los de nuestro bando y no lo digo en términos políticos únicamente. Ahí está Norman Briski como consuelo. Igual siempre son más los del otro bando.
"Percibimos un mundo donde cada objeto no es el correlato puntual de cada voluntad individual sino el punto de entrecruzamiento en que mi perspectiva se mezcla a la del otro: y en la medida que aquello que este lazo intersubjetivo pone en las cosas se halla a cada momento aprisionado por el peso de la tradición y por la ideología conservadora que emana de las estructuras actuales de la sociedad, no sería demasiado insensato afirmar que percibir es percibir un-casi-mundo-de-derecha...", sumo algo más de Masotta en su análisis acerca de Arlt.
Agotado ya jueves profundo, me fui al sobre. No hubo sueño reparador, pero sí descanso.
Retomé hoy, revoleando piñas al aire, a contramano de la ilusión por desplegar el consabido y efectivo "Cross a la mandíbula" en las letras que Robertito nos legó.
Y bueno, por algo se empieza.